EVANGELIO DOMINICAL

Domingo 12º durante el año


Botón homilético                                                                                                    Francisco Quijano OP

Domingo 12º durante el año (25.6.2017) Mateo 10, 26-33

● Tres actitudes relacionadas: vencer el temor, ser transparente, tener confianza. Puedo tener temor por decir lo que pienso; puedo encubrirme y esquivar mi pensamiento; puedo tener confianza y manifestar lo creo.

● Jesús habla de estas actitudes en su contexto y en el de muchos cristianos hasta nuestros días: las persecuciones. Podemos leerlas también en un contexto diferente.

● Nuestros temores tienen muchas causas, una de ellas es el encubrimiento: huir de mí, no reconocer quién soy por temor a asumir mis oscuridades y a admitir, por cierto, mis luces.

● Nuestro encubrimiento viene de esquivar la verdad, no una verdad abstracta, sino la verdad de quién soy, qué quiero, qué pienso realmente.

● Nuestra desconfianza se presenta frente a los demás, es también inseguridad de quién soy yo en verdad, qué quiero.

● Ser una persona honrada, tener una vida auténtica, actuar sin doblez, hablar con sinceridad, expresarse verazmente, tener palabra leal, cumplir las promesas, confiar en los demás… no requiere el heroísmo del martirio.

● Sí exige, en cambio, vencer temores, ser transparente, tener confianza. A eso nos invitan las palabras de Jesús.

 

 

Claves para la homilía                                                                                                  Julián Riquelme OP

◙ Contexto ► Palestina, año 30: Las autoridades judías persiguen a Jesús, porque presenta una nueva imagen de Dios. ► Antioquía (Siria) año 80: Los cristianos son perseguidos por practicar la justicia del Reinado de Dios en la sociedad (Mt 5,10).

◙ Sentido El tema del Evangelio es la "Confianza en Dios". El texto puede dividirse en tres partes:

● No tener miedo a vivir profundamente el Evangelio (10,16-28). El libro de los Hechos de los Apóstoles llama a los seguidores de Jesús “discípulos”, “cristianos” y “los del camino”. El Evangelio de hoy propone un nuevo nombre: “Los que no tienen miedo”. Jesús no recomienda a sus discípulos que se enfrenten con sus perseguidores, sino que no cesen por ningún motivo de comunicar el mensaje, principalmente con la vida. En un tiempo el Evangelio del Reino estuvo oculto en Galilea, ahora tiene que legar a saberse en todas partes.

● Valorar más la vida humana que la de los pajaritos (10,29-31). Dios es el Padre bueno, y Jesús exhorta a tener confianza en el Padre. Nada de lo que sucede se le esconde, ni siquiera las cosas más mínimas, como la muerte de los pajaritos. A Él no se le escapa nada (“cabellos”) de la vida de quienes siguen a Jesús. Su Amor abraza la creación entera.

● Tomar el camino de la humanización (10,32-33). Como conclusión, Cristo afirma que quien vive profundamente el Evangelio entre los seres humanos, corona su vida con el éxito; pero quien se acobarda, se aboca a la ruina y termina en el fracaso. La imagen de Jesús declarando ante el Padre de muchos hijos, subraya el sentido humanizante del Evangelio. La fidelidad del discípulo a Jesús en la persecución, es la que lo salva a través de la muerte.