Son esculturas masivas en hierro y hormigón, de gran volumen, bien ancladas en rocas o en el suelo. Dan la impresión de ser ingrávidas, no de volar desplazándose en el aire, imposible con ese peso y ese arraigo, sino extenderse en el espacio, abarcarlo para abrazar el viento, las nubes, el mar, el horizonte, los ocasos, la ciudad, las edificaciones…
Eduardo Chillida (San Sebastián, Guipúzcoa, 1924-2002) es deudor de la escultura monumental representativa que viene de la antigüedad, pero la transforma en formas abstractas que se inscriben en el paisaje, urbano o agreste, y dialogan con él.
El propio Chillida expresa en pensamientos concisos lo que desarrolla en sus esculturas. Te invitamos a leerlos y a contemplar, ya que no en vivo, en reproducciones fílmicas y fotográficas algunas de sus obras. [F. Q.]
♦ Asombro
•Todo está por descubrirse. Pensar que lo conocemos todo es un cuento.
• Hay que buscar caminos que no hayan sido transitados antes.
• Lo que sé hacer, es seguro que ya lo he hecho. De aquí que siempre tengo que hacer lo que no sé hacer.
• No creo demasiado en la experiencia. Pienso que es conservadora. Creo en la percepción que es otra cosa. Es más arriesgada y progresista
• Lo hice mejor porque no lo conocía e iba cargando de dudas y de asombro.
• Lo que se puede enseñar no vale gran cosa, lo que vale es lo que tú tienes que aprender.
• Es bastante sencillo, todo se reduce a aprender a preguntar.
♦ Aventura
• El arte está ligado a lo que no está hecho, a lo que todavía no creas. Es algo que está fuera de ti, que está más adelante y tú tienes que buscarlo.
• El artista sabe lo que hace, pero para que merezca la pena debe saltar esa barrera y hacer lo que no sabe, y está en ese momento más allá del conocimiento.
• El arte para el artista es una pregunta: ¿es la sucesión de preguntas nuestra respuesta?
¿No será el paso decisivo para un artista el estar con frecuencia desorientado?
• En arte todo se puede aprender. Y nada o casi nada se puede enseñar.
• Con nobleza como la mar, no con malicia, esfuerzo constante sin aparente fin. ¿Para qué sus blancas y tremendas luchas? Así el arte, que no es refugio sino intemperie, no orienta. Quizás desorienta hacia delante.
♦ Sensibilidad
• La mano tiene la articulación más rica del espacio.
• Dibujaba de toda la vida, no se vivir sin dibujar.
• No se ve sino lo que se tiene ya dentro del ojo.
• Se ve bien teniendo el ojo lleno de lo que se mira.
• Los ojos para mirar. Los ojos para reír. Los ojos para llorar. ¿Valdrán también para ver?
• Alerta y libre hasta el final. Guiado solo por un aroma.
• El límite es el verdadero protagonista del espacio, como el presente, otro límite, es el verdadero protagonista del tiempo.
• La música es una construcción en el tiempo y en el espacio, a Bach como arquitecto no ha habido nadie que se le arrime.
♦ Peine del Viento |
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♦ Monumento a la Tolerancia |
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♦ Elogio del Horizonte |
Septiembre 2016
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