EVANGELIO DOMINICAL

Domingo de la Santísima Trinidad


Botón homilético                                                                                                   Francisco Quijano OP
 

Domingo de la Santísima Trinidad (31.5.2015): Rom 8,14-17; Mateo 28,16-20

● Todo el conocimiento de la fe —a decir de Tomás de Aquino— versa sobre estas dos cosas: la divinidad de la Trinidad y la humanidad de Cristo.

● Por su humanidad —que hemos contemplado en Cuaresma y Pascua— Jesús nos ha revelado el misterio que envuelve todo lo que existe, lo penetra todo y todo lo mueve —el Espíritu de Dios— celebrado en Pentecostés.

Aghía Triáda  Sancta Trinitas  Triada Santa: es el gran Misterio en el que se nos insinúa apenas el Dios que es origen, camino y meta de todo lo creado.

● Origen: Dios Padre por su Palabra ha creado todas las cosas. Camino: la Palabra hecha carne camina en nuestra historia. Meta: en su Espíritu de Amor Dios nos brinda su amistad para siempre.

● ¡De Ella —Padre, Hijo, Espíritu—, por Ella, para Ella existe todo! ¡A Ella — Αγία Τριάδα— la gloria por los siglos de los siglos. Amén!


• Arcabas (Trémery, Lorraine, France 1926): Trinidad en la Iglesia de San Vicente de Paul, Grenoble, Suiza

 

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Claves para la homilía                                                                          Julián Riquelme OP
 

Domingo de la Santísima Trinidad: Mateo 28,16-20

◙ Contexto. - Palestina, año 30: Los discípulos van a reunirse en Galilea sólo porque las mujeres rumorean que el Maestro está vivo. - Antioquía (Siria), año 80: En su misma muerte Jesús ha sido exaltado y glorificado.

◙ Sentido. Al hablar de la “misión universal”, el Evangelio de hoy puede ofrecer los siguientes aspectos:

La finalidad del envío: “Hagan que todos los pueblos sean mis discípulos” (Mt 28,19b). Evangelizar es avivar la conciencia de la presencia de Jesús en nuestra tierra y en el cosmos; propiciar discípulos no de los discípulos, sino de Cristo; favorecer que las personas se encuentren con Jesucristo, y lo acepten como su Maestro y su Señor.

La mención de la Comunidad Trinitaria: “Bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo” (Mt 28,19c). “Bautizar” significa “consagrar”, pues literalmente se agrega “hacia el nombre de”; el bautismo marca la integración de las personas a la Comunidad Trinitaria, y a la Comunidad Iglesia; el hecho que un ser humano, Jesús, por una especial gracia de Dios, forme parte de la Santísima Trinidad, eleva nuestra mirada hacia horizontes insospechados.

El contenido de la enseñanza: “Enseñándoles a cumplir todo lo que Yo les he mandado” (Mt 28,20ª). Cristo manda unir, siempre y en todo lugar, el amor a Dios y el amor al prójimo. Esto equivale a reinterpretar toda ley, ayudados por el Espíritu Santo, respetando los procesos humanos (Mt cc. 5-7).
 

• Masaccio (1401-1428): La Sagrada Trinidad con la Virgen y San Juan, en Santa Maria Novella, Florencia