Lecturas: Hechos 14,21-27 / Salmo 144,8-13 / Apocalipsis 21, 1-5 / Juan 13, 31-35

Botón homilético – Francisco Quijano

• La gloria irrumpe en el cenáculo donde Jesús comparte su última comida con sus amigos e ilumina las sombras que se ciernen sobre él y ellos. Es la Hora de la Gloria: culminación de la obra de Jesús que es la obra del Padre en él por la humanidad.

• La glorificación de Jesús y la glorificación del Padre es un misterio paradójico, desconcertante, que conjuga en unidad indisoluble la ignominia de la muerte en cruz y la exaltación en gloria de la resurrección.

• «Glorificación» quiere decir: muerte que es fuente de vida, vejación que es exaltación, odio que es vencido por amor, Crucificado que es Resucitado. Jesús ha llegado a esa Hora de Gloria.

• La Gloria irradia en un mandamiento central en el cristianismo y lo es también, de hecho, para toda la humanidad: «Les doy un mandamiento nuevo: ámense unos a otros como yo los he amado». ¿Por qué es nuevo? ¿Cuáles son sus implicaciones?

• La novedad está en esa cláusula de la consigna que dice: «Como yo los he amado». Es la vida de Jesús: un amor incondicional que cruza las fronteras de la exclusión: desde los marginados convoca y reúne a todos los demás. Es su resurrección: el amor incondicional del Padre que cruza la frontera infranqueable de la muerte a la vida.

• ¿Cómo cruzamos las fronteras que dividen a nuestra humanidad? Los exilados e inmigrantes, las víctimas de guerras y persecuciones, ¿dónde están en nuestra vida? Las mujeres musulmanas, las mujeres golpeadas, sometidas y burladas, ¿dónde están? Los ancianos y enfermos, ¿dónde están? Los menores y víctimas de abusos, ¿dónde están?

• El amor que Jesús encomienda a quienes los siguen no se rinde ante los obstáculos, desafía las amenazas, no se ciñe a nuestros círculos cercanos, abarca a una humanidad sin condiciones ni fronteras.

• «I have a dream that one day…» «Yo tengo un sueño de que un día…» fue la proclama de Martin Luther King el 28 de agosto de 1963 ante el Monumento a la Memoria de Abraham Lincoln en Washington.

• Nelson Mandela fue liberado de la cárcel por Frederick de Klerk, último presidente del régimen del apartheid, el 11 de febrero de 1990: «Al salir por la puerta hacia mi libertad supe que, si no dejaba atrás toda la ira, el odio y el resentimiento, seguiría siendo un prisionero» «El perdón libera el alma, hace desaparecer el miedo. Por eso el perdón es un arma tan potente».

• Los mensajes de Volodímir Zelenski, presidente de Ucrania, a los parlamentarios de varios países han tenido resonancia mundial. Reino Unido: «Ustedes no quisieron perder su país cuando los nazis quisieron arrebatárselo. Lucharon por él». Alemania: «Cada bomba que cae, cada decisión que no se adopta es una piedra con la que se construye el muro». Israel: «Escuchen qué dice el Kremlin, son las mismas palabras, la misma terminología que los nazis usaron contra ustedes».

• Y tú, ¿qué vas a decir y qué vas a hacer para cruzar las fronteras de la polarización política? ¿Qué vas a decir y qué vas a hacer para marchar codo con codo, luchar, actuar para rescatar a tu país de la incitación al conflicto? ¿Qué vas a decir y qué vas a hacer para construir una sociedad fraterna y una política digna, decente, respetuosa?

Lectura: Apocalipsis 21,1-5

• El vidente del Apocalipsis proyecta al infinito la Utopía final: «Vi un cielo nuevo y una tierra nueva… Vi la nueva Jerusalén engalanada como novia... Esta es la morada de Dios con la humanidad: habitará con ellos, secará sus lágrimas, no habrá más muerte ni pena ni llanto ni dolor. Todo lo antiguo ha pasado. Yo hago nuevas todas las cosas».

• ¿Esa visión es falaz? ¿Ese un sueño es fatuo? Pese a la esclavitud, pese al apartheid, pese a las guerras, pese a los males que aquejan a la humanidad, Jesús con el don de su vida nos revela la gloria de un mundo nuevo: «Ámense unos a otros como yo los he amado». Este amor es el germen de una vida nueva, en él se encierra la utopía de una humanidad nueva.

• Volodímir Zelenski con su esposa Olena Zelenska

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Claves para la homilía: Julián Riqueme

• Contexto - Palestina, año 30: En la Última Cena, Judas Iscariote sale de la reunión de los discípulos para traicionar al Maestro. - Jerusalén, año 100: Pareciera que el poder opresor de los líderes judíos y del Imperio romano van a hacer fracasar el proyecto de Jesús.

• Sentido El Evangelio contiene “el mandamiento nuevo de Cristo”. El texto podría dividirse de la siguiente manera:

• Glorificación del Hijo del hombre y de Dios (13,31-32). Cristo explica la aceptación de su muerte como manifestación de su gloria, que se identifica con la de Dios. La palabra “gloria” (gr. “doxa” = poder) equivale a “amor”: El Maestro comunica su amistad y amor en su entrega, lo cual manifiesta a la vez el amor del Padre por todos. Lección: El amor de Dios Padre por todos los seres humanos se manifiesta a través del amor de Jesús.

• Anuncio de la partida (13,33a). Jesús se dirige a los suyos con palabras de afecto. Les dice que su partida es inminente, para que abran sus corazones al testamento que les va a dejar. Moraleja: La comunión fraterna es fruto de la fe en Jesucristo.

• Amor fraterno (13,34-35). El Nazareno da a los suyos el mandamiento nuevo. Aquí San Juan, para referirse al “mandamiento”, no usa la expresión griega “nomos”, que designa un precepto, sino “entolé”, que significa “enseñanza de sabiduría”. Además, esta enseñanza es “nueva”, porque Cristo invita a amar como Él ama a las personas. Este será el código y el signo distintivo de sus comunidades. Mensaje: El amor al prójimo es un mandamiento nuevo, no porque no existiera ya en el Antiguo Testamento, sino porque es un amor que está siempre dispuesto a aceptar lo nuevo, por muy contrario que sea a nuestros gustos, a nuestras costumbres, a nuestra rutina.

Pascua V - Lunes (aquí)